Cooperativa de mujeres crece con buenas proyecciones




Historia con Hilo, se llama la entidad que nació hace tres años con la idea de aprender el oficio de corte y confección y hoy no para de trabajar. Ahora van por la marca propia.


La cooperativa integrada por seis mujeres nació de la necesidad de generar un aporte económico en la familia y actualmente está capacitando a cinco mujeres más con la idea de que aprendan el oficio y puedan independizarse o sumarse al grupo. "El 2016 fue un muy buen año. Como en todo, la situación está difícil, pero fue un año llevadero y con mucho trabajo. Hicimos cosas para particulares y para los jardines de la Municipalidad y las remeras amarillas de los empleados", contó con orgullo Claudia, una de las integrantes y fundadora de Historias con Hilo.


"Hicimos un curso de capacitación de tres meses y después se formó la cooperativa que hace tres años está funcionando. Somos mamás, tías y abuelas y lo hacemos cuando los chicos van al jardín", destacó Claudia. En ese momento aprendieron lo básico: enhebrar la máquina, coser y moldería; una vez en marcha realizaron cursos de Gestión Empresarial, Recursos Creativos y hasta en serigrafía para hacer sus propios estampados.


En el taller vuelcan toda la creatividad y pasión. Entre telas de todos los colores, pero la mayoría amarilla para la ropa de trabajo de los municipales, dejan volar su imaginación y sueñan con cosas nuevas. La cooperativa en expansión tiene proyectado comprar más herramientas y material para expandirse, a través de este modelo asociativo que les dio una gran oportunidad.